Música para estudiar

Prepararse un examen requiere de paciencia, perseverancia y concentración. Sin estos tres factores, estamos perdidos. Los dos primeros responden a la fuerza de voluntad de cada persona pero no siempre podemos concentrarnos. ¿Cómo podemos conseguirlo? Escuchando música para estudiar. Para ello, tenemos que estar en un lugar en el que no molesten las canciones que oiremos. Es decir, este método excluye bibliotecas. En cambio, se puede practicar al aire libre o en casa. El tipo de sonidos que nos ayudan a prepararnos para un examen depende del individuo y de sus gustos musicales. Por ejemplo, a quien no le guste Chopin, no le servirá para instruirse en una materia.

¿Qué tipo de sonidos favorecen un aprendizaje profundo y eficaz? Según los expertos, la música clásica, ya que es armónica. En concreto, las composiciones musicales de Mozart estimulan nuestro cerebro y lo ayudan a emprender tareas como estudiar. Una de las mejores piezas musicales del austriaco es «Sonata para piano N° 16 en Do Mayor K. 545». Al oírla, sientes una paz interior que te envuelve por dentro. Esta sensación de tranquilidad hace que aumente la capacidad de concentración y, en consecuencia, la disposición para asimilar conocimientos. Aunque las piezas musicales de Mozart sean la mejor recomendación para prepararse un examen, existen otras sintonías que refuerzan nuestro cerebro para desempeñar tan importante tarea. Hablo de los murmullos de la Madre Tierra.

La naturaleza está repleta de sonidos relajantes para el ser humano: las olas del mar, la brisa de la mañana o el retumbar de una cascada. Todos ellos los podéis encontrar adentrándoos en montañas y playas o surcando la Red. De los tres sonidos mencionados, destaco la serenidad que aportan las olas del mar para desarrollar nuestra capacidad de aprendizaje. Escucharlas es como oír el susurro del océano en tus oídos. El rumor del agua marina despeja tu mente y te prepara para una jornada de estudio en la que nada te molestará. No obstante, ¿sólo funcionan los sonidos relajantes? No. Existe una gran variedad de melodías, aptas para prepararse para un examen, que no están compuestas por tonos armónicos. Por ejemplo, tus canciones preferidas son muy útiles aunque no pertenezcan al género clásico. Cuando hay que aprenderse una materia, la música es nuestra aliada sea del tipo que sea. Lo mejor que se puede hacer es probar lo que conocemos hasta dar con la música para estudiar adecuada a cada individuo.