Cuidadores de acción

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Los cuidadores de acción corresponden a los roles cinematográficos que algunos actores de películas de acción han interpretado. Normalmente, estos artistas suelen protagonizar largometrajes donde abundan las artes marciales, las explosiones, la lucha del bien contra el mal y la actitud de macho alfa que impregna al protagonista. Sin embargo, existen cintas donde estos intérpretes se alejan de este arquetipo para entrar en propuestas cinematográficas de cariz más familiar, humorístico y prácticamente ausente de tormentas de mamporros. De los ejemplos de cuidadores de acción que se han dado en el séptimo arte, existe un subtipo cuya trama gira en torno a un agente de la ley encubierto que cuida de niños porque entre ellos está la pista clave para ajusticiar al villano de turno. Esta fórmula la probaron dos actores en diferentes épocas con un resultado dispar. Se trata de los films Kindergarten cop (Universal Pictures, 1990) y The Pacifier (Walt Disney Pictures, 2005). Arnold Schwarzenegger vs. Vin Diesel. Suena el timbre de la escuela.

En Kindergarten cop Schwarzenegger interpreta al detective John Kimble, un curtido agente solitario que no deja escapar a ningún criminal. Si alguno se resiste a las autoridades, él es la solución. Para proteger a una familia de un criminal, debe de trabajar de encubierto como profesor de infantil. Cuidar de niños en un colegio supone un reto para él. Sin experiencia como docente, teme que los niños no le respeten, lo cual sucede al principio. El detective, usando su ingenio, les presenta a los alumnos su hurón y aplica sus conocimientos policíacos en clase a modo de juegos que, a su vez, le ayudan en su investigación. Esta experiencia como profesor hace que el agente pase de trabajar en solitario a formar equipo con su compañera en el caso y explore su faceta más afectuosa cuidando de sus pequeños estudiantes.

Sobre el papel, cualquier actor de acción podría interpretar a este personaje. No obstante, Schwarzenegger logra insuflarle a Kimble un equilibrio entre la gallardía propia de los héroes de acción con la imagen de hombre de familia característica de comedias familiares. Asimismo, con este resultado él rompe con el lugar común de que los actores de cine de acción son incapaces de mostrar emociones o protagonizar films de registros en los que sus habilidades físicas no sean el centro del argumento. Schwarzenegger es la prueba de que es posible deshacerse del traje de macho alfa y abrazar el fuego familiar.

The Pacifier toma el molde del anterior largometraje cambiando la docencia por el arduo trabajo de niñero. El argumento de esta cinta se asemeja a la anterior. Un duro agente de la ley interpretado por Vin Diesel, el teniente Shane Wolfe de los SEAL de la Marina de EE.UU, tiene como misión hallar un programa informático secreto en el hogar del hombre que lo inventó y fue asesinado por ello. Mientras lo busca, debe de cuidar de sus hijos, ya que la viuda está de viaje en busca de la llave que abra la caja fuerte donde se esconde dicho programa. De nuevo, un actor habituado a participar en películas de acción cambia de registro para enfundarse en el papel de un canguro sin experiencia en el cuidado de niños. La adaptación de Wolfe a su nuevo entorno también pasa por intentar realizar este trabajo como una misión militar más, ya que llama a los pequeños Charlie más un número o los trata como si estos hermanos y hermanas estuvieran en un campamento militar.

Hasta que el personaje no se aleja de su estereotipo de héroe de acción no consigue avanzar en su investigación ni vemos cómo se desenvuelve Diesel en una cinta familiar. El actor logra sumergirse en este tipo de películas aunque Wolfe continúa encasillado en hablar con jerga militar y no es hasta el final del largometraje cuando aparece un equilibrio entre las dos facetas del personaje. Por su parte, Diesel demuestra que como actor no le importa realizar bailes infantiles o dejarse embadurnar por una sustancia fangosa que dé credibilidad a que su personaje ha buceado por las cloacas. Pese a estos pasos para adentrarse en el cine familiar, el peso de la naturaleza militar de Wolfe hace que no brille tanto la faceta de cuidador del personaje.

Kindergarten cop y The pacifier, aunque partan de la misma premisa, toman caminos divergentes. En el primer largometraje se ve claramente cómo el héroe de acción protagonista se convierte en un profesor querido por sus alumnos sin olvidarse que es un agente de la ley en una misión encubierta. En cambio, en la segunda cinta se opta por explotar este arquetipo haciendo que Diesel protagonice escenas cómicas, de acción o de conducción al más puro estilo Dominic Toretto. El film que protagoniza Schwarzenegger logra un equilibrio entre ambas facetas con una interpretación actoral sobresaliente mientras que la propuesta que le ofrecen a Diesel, a pesar de que él consiga esbozar un personaje entrañable, se queda a medio gas debido a la importancia que se le da a recordar en todo momento que Wolfe es militar.

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