Guardianes de la noche #5

Guardianes de la noche #5: Camino al infierno (Kimetsu no Yaiba, Koyoharu Gotouge,  Norma Editorial, Barcelona, 2019) sigue la trama donde se quedó en el tomo previo. La lucha contra la familia de demonios de la montaña Natagumo. Este volumen consta de los siguientes capítulos: «Dispersión», «Esto pinta mal», «Espada rota», «Lo auténtico y lo falso», «Toda una vida ante los ojos», «El dios del fuego», «Shinobu Kochō», «Detrás» y «Camino al infierno». Tanjirō, Nezuko e Inosuke continúan luchando contra la familia de demonios araña. Los dos pilares de la organización de cazademonios llegan al monte Natagumo para ayudar a sus compañeros. Los protagonistas combaten al límite. Al toparse con adversarios poderosos, estos los ponen entre las cuerdas. Pierden sus respectivos combates.

De los miembros de la familia de demonios araña, quedan la hija, el hermano mayor y el padre. El hermano menor y la madre fueron derrotados en la anterior entrega. Tanjirō e Inosuke empiezan una pelea contra el padre. Sus espadas no logran atravesar la piel del ente demoníaco. Este, por su parte, no siente nada ante los ataques de los jóvenes matademonios. El mayor de los hermanos Kamado sale disparado tras recibir un ataque de su contrincante. El chico con dos Nichirintō se queda solo ante este temible adversario. Los filos de sus espadas no le causan ni un rasguño al demonio. Sin embargo, el espadachín que usa la respiración del jabalí logra cortarle un brazo a su rival tras varios intentos fallidos. Es su única victoria. Recibe severos golpes que se suman a heridas anteriores. Sus Nichirintō se rompen. El enemigo, al haberle afectado uno de los ataques de Inosuke, se transforma. Gana tamaño y fuerza. Por primera vez, este cazademonios huye de un enfrentamiento. Sabe que no va a ganar. Antes de ser derrotado, aparece Giyu y vence sin problemas al padre.

Tanjirō aterriza en una zona del bosque alejada del río donde se estaba desarrollando el combate entre Inosuke y el padre araña. En esta parte del monte Natagumo, se hallan el hermano mayor y la hermana de la familia de demonios araña. Él cree que estos rivales son más débiles que el ente demoníaco de antes, ya que considera que es una de las doce lunas demoníacas. Durante la batalla, se revela que el ser oscuro que posee este rango es el hermano mayor. Dicho personaje pelea contra los Kamado. Se llama Rui. Su técnica, igual que el resto de su familia ficticia, se basa en tejer telas de araña. Tanjirō prueba varias de las técnicas que su maestro le enseñó. Ninguna funciona. El cansancio va apareciendo en él. Aún así, su espíritu combativo sigue intacto. No deja de analizar el combate en busca de un hueco desde donde atacar. Conforme cree que va ganando terreno, el demonio va ejecutando golpes más devastadores. En un momento dado, está a punto de matar al chico.

Guardianes de la noche #4

Guardianes de la noche #4: Una espada inquebrantable (Kimetsu no Yaiba, Koyoharu Gotouge, Norma Editorial, Barcelona, 2019) continúa la historia donde se quedó en el tomo anterior. El volumen comprende los capítulos «Pelea sin armas», «Inosuke Hashibira», «Llamada urgente», «El monte Natagumo», «Marionetas», «Otro dará el paso por mí», «Un hedor intenso», «Avanzando en la oscuridad» y «Una espada inquebrantable» que corresponden a los arcos de La casa tambor y el de La montaña Natagumo. En este tomo se profundiza en dos personajes nuevos que se introdujeron brevemente en capítulos anteriores. Son Zenitsu Agatsuma e Inosuke Hashibira. Además, aparece una casa de reposo para los cazademonios que están heridos como es el caso de los protagonistas. En ella descansan los tres jóvenes antes de partir hacia la nueva misión que les encomienda le cuervo de Tanjirō. Dicho trabajo está ubicado en la montaña Natagumo que da nombre a la saga correspondiente. Esta, a su vez, abarca tres volúmenes del manga.
Zenitsu Agatsuma utiliza la respiración del trueno. Cada estilo de lucha posee varias formas. En el caso de la respiración del agua del maestro Urokodaki, se han visto nueve hasta el momento. Según Zenitsu, la suya posee seis y él solo ha aprendido a dominar una. Esta limitación hace que se sienta un inútil. Sin embargo, su maestro cree en él. Le anima a perfeccionar la única técnica que conoce porque, a veces, es mejor pulir un ataque hasta su máxima expresión que saber utilizar varios. Durante una analepsis sobre el pasado de este matademonios, se revela que su cabello era moreno. Cambió de color cuando le alcanzó un trueno. El chico en la casa de reposo conoce a Nezuko y se enamora de ella al instante. El hecho de que Tanjirō crea en él y que viaje con su hermana le da fuerzas para dejar de ser un cobarde y una carga para sus compañeros. Como suele ocurrir en algunos shōnens, el personaje miedoso halla valor para ser una mejor versión de sí mismo.
Inosuke Hashibira se presenta como el tipo con cabeza de jabalí. Esta resulta ser una máscara que lleva para ocultar su verdadero rostro. El de un muchacho extremadamente bello. Su cara contrasta con un cuerpo musculado. El chico se caracteriza por ser violento, agresivo y competitivo. Cuando conoce a Zenitsu y Tanjirō, le da una paliza al primero porque quiere abrir la caja donde se esconde Nezuko. El discípulo de Urokodaki intercambia golpes con el joven salvaje sin usar sus espadas. Según se revela en estos capítulos, las peleas entre compañeros cazademonios están prohibidas. Gana Tanjirō gracias a sus duros cabezazos. La historia de Inosuke es particular. Él ha crecido en una montaña y, a diferencia de Tanjirō, se ha ido fortaleciendo a base de enfrentarse contra animales. No ha tenido maestro cazademonios. Un día noqueó a un joven matademonios y le robó la Nichirintō. Debido a este encuentro, descubre la existencia de la Selección final, participa en la misma edición que Tanjirō y Zenitsu y sobrevive. Por ello, posee dos catanas. Su estilo de lucha lo ha cultivado él mismo. Se llama respiración de la bestia. El sentido que tiene más desarrollado que los demás es el del tacto. Gracias a esto, percibe objetos sin verlos o el carácter de las personas igual que sus compañeros con el oído y el olfato.

Guardianes de la noche #3

Guardianes de la noche #3: ¡Levanta el ánimo! (Kimetsu no Yaiba, Koyoharu Gotouge, Norma Editorial, Barcelona, 2019) continúa la historia donde se quedó en el tomo anterior. El volumen comprende los capítulos «El demonio de las flechas», «Hechizo», «Siempre juntos», «Zenitsu Agatsuma», «La mansión de los tambores», «Y de repente, un jabalí», «Zenitsu duerme y el jabalí enseña los colmillos», «Una ex Luna Demoníaca» y «¡Levanta el ánimo» que corresponden a los arcos de Asakusa y de la mansión del tambor. En esta entrega concluye el ataque de Susamaru y Yahaba y se inicia una nueva misión donde Tanjirō coincide con otros cazademonios.

Los dos subordinados que están atacando la casa de Tamayo la reconocen como una traidora a la que hay que apresar. Les interesa capturarla con vida a ella y a Tanjirō. Los demás no les importa que mueran. El joven matademonios combate contra sus adversarios con dificultades. Encadena una técnica tras otra a la vez que analiza el estilo de lucha del contrincante para descubrir qué momento aprovechar para contraatacar. Se centra en Yahaba mientras su hermana, la doctora y Yushirō hacen frente a Susamaru y su balón. El rival del chico focaliza sus ataques en flechas móviles que parecen impredecibles. Los golpes directos no funcionan. Al comprender esto, Tanjirō combina las técnicas Remolino de corrientes, de la tercera forma, y el Molino horizontal, de la segunda forma. De esta manera genera una corriente de agua que arremolina las flechas para después lanzarlas contra el enemigo. Y vence.

El final de Susamaru es distinto. Nezuko pierde una pierna al chutar el balón de la demonio. Tras ser curada por Tamayo, repite la acción sin herirse. Sin embargo, su contrincante es más fuerte que ella, Yushirō y la doctora. Por ello, este personaje utiliza sus artes demoníacas para que Susamaru pronuncie el nombre de su creador. Según parece, cada vez que un demonio que está bajo la influencia de Muzan Kibutsuji pronuncia en voz alta su nombre, muere a manos de un hechizo que lleva adherido a las células de Kibutsuji. Así pues, se descubre una nueva manera de acabar con entes demoníacos. Tamayo le cuenta a Tanjirō que para curar a su hermana necesita sangre de ella y de demonios poderosos. Al analizarlas, estará más cerca de una cura. Desde la conclusión de este combate así como en los sucesivos, vemos como el protagonista o alguno de sus compañeros de viaje toma muestras de sangre demoníacas que le envían a la doctora. Los hermanos Kamado salen de Tokio hacia una nueva misión, dándole las gracias a sus nuevos aliados por todo lo que le han ayudado.

Guardianes de la noche #2

Guardianes de la noche #2: Tú eres… (Kimetsu no Yaiba, Koyoharu Gotouge, Norma Editorial, Barcelona, 2019) continúa la historia donde se quedó en el tomo anterior. El volumen comprende los capítulos «Hermano», «Regreso al hogar», «La ciénaga abductora», «Sugestión», «No puedo», «Tú eres…», «La cólera de Kibutsuji: un cautivador aroma a sangre», «La opinión de la doctora» y «El juego de la pelota» que corresponden a las sagas de la primera misión y parte del arco de Asakusa. Tanjirō vence al demonio que devora discípulos de Urokodaki y aprueba el test para ser matademonios junto a otros participantes. Todos son muy jóvenes. Una vez pasada la prueba, se ahonda en el funcionamiento de la organización de cazademonios. A su vez, el protagonista empieza a ejercer como tal y se topa con el asesino de su familia. Ante esta revelación, se incide en la sed de venganza del muchacho.

Mientras le asestaba el golpe de gracia, el demonio que mató a alumnos de Urokodaki teme ante la destreza de Tanjirō. El chico ha pasado de carecer de habilidades combativas a asimilar las enseñanzas de su maestro. Tras la derrota, las dos supervisoras del examen le cuentan a los nuevos reclutas cómo funciona el cuerpo de matademonios. Dicha organización posee la siguiente jerarquía que se enumera de mayor a menor rango: kinoe, kinoto, hinoe, hinoto, tsuchinoe, tsuchinoto, kanoe, kanoto, mizunoe y mizunoto. A cada miembro de este grupo de espadachines especiales le es asignado un cuervo parlante que le irá informando de sus misiones.

En cuanto al equipamiento, se les proporciona un uniforme confeccionado con materiales resistentes a los ataques de los demonios. Por su parte, las catanas se forjan a partir de una pieza de acero que ha sido elegida previamente por el cazademonios. A partir de este material se forja el arma. A Tanjirō le toca una catana que cambia de color según quién la esgrima. Esta clase de catanas se conocen como nichirintō. Al empuñarla, esta se vuelve negra. Sobre este color, existe la creencia entre los matademonios de que un cazador de demonios que no alcanzan cierta fama es denominado hoja negra. El arma de Tanjirō se la da su forjador, un tipo con máscara de Hyotokko, en casa del maestro Urokodaki.

Guardianes de la noche #1

Guardianes de la noche (Kimetsu no Yaiba, Koyoharu Gotouge, Norma Editorial, Barcelona, 2019) es un shōnen protagonizado por Tanjirō Kamado y su hermana Nezuko Kamado. La trama, ambientada en la Era Taishō, arranca con el asesinato de la familia Kamado. Solo sobreviven Tanjirō y Nezuko que ha sido infectada con sangre de demonio. Su hermano es un chico afable, compasivo y trabajador. Ante la tragedia familiar por la que pasa, decide hallar una cura para que su hermana vuelva a ser humana. Ya desde el comienzo se nos presentan a los demonios y al cuerpo de matademonios como principales grupos que luchan entre sí. Unos devoran humanos mientras que los otros acaban con estos entes demoníacos. El primer tomo, que se titula Crueldad, abarca los siguientes capítulos: «Crueldad», «Un desconocido», «Antes de que amanezca», «El diario de Tanjirō (primera parte)», «El diario de Tanjiro (segunda parte)», «Un montón de brazos» y «Fantasmas» que corresponden al arco de La selección final. La edición de Norma Editorial ha sido traducida por Víctor Gomà.

Tanjirō Kamado vive con su madre y sus cinco hermanos en las montañas. Desde la pérdida de su padre, él se encarga de que a los suyos no les falte nada. Baja al pueblo a vender carbón vegetal y así poder proveer a la familia de sustento. Un día durante una fuerte nevada un aldeano, Saburō, le aconseja que no se adentre en el bosque de noche, ya que cuando cae el sol aparecen demonios devora-hombres. El chico cree que es una fantasía. Sin embargo, duerme en casa del paisano. Al día siguiente, el muchacho regresa a su hogar. Todo el mundo ha sido asesinado excepto su hermana Nezuko. La lleva a cuestas en busca de un doctor, ella se despierta y, gracias al cazador de demonios Giyū Tomioka, se descubre que la joven se ha convertido en demonio. Dicho suceso motiva a su hermano a salvarla. Para ello, aprenderá a luchar contra demonios igual que Giyū.

Este primer volumen se centra en el entrenamiento de Tanjirō como matademonios. Por recomendación de Giyū, sale en busca del maestro Sakonji Urokodaki. Él adiestra al chico para prepararlo para la prueba llamada La selección final. Este examen es un requisito que todos los cazademonios deben de superar para formar parte de esta organización de guerreros. El tomo termina antes de la conclusión del test. En los siete capítulos que comprende el volumen pasan unos dos años en la historia principal. En todo este tiempo Tanjirō ha estado entrenándose. El personaje se caracteriza por ser compasivo, dubitativo y poseer un buen olfato. Durante estos primeros capítulos, se reincide en este aspecto en varias ocasiones. Parece un sabueso. No posee capacidades como luchador. Su única motivación es que su hermana vuelva a ser humana. Dicha determinación lo guía para lograr su meta. El resto de personajes se introducen fugazmente. La mayoría o son demonios que ocupan alguna viñeta o caza demonios que el protagonista va conociendo en su viaje.